A fin de fortalecer el combate al delito, principalmente en la zona conurbada de San Luis Potosí y Soledad de Graciano Sánchez, el Gobierno del Estado puso en operación la Fuerza Metropolitana Estatal (FME) y conjuntamente con la Fuerza de Reacción Inmediata Mixta (FRIM) lograron desarticular en unos meses 15 bandas delictivas que operaban en la zona centro del estado, en la huasteca norte y en el altiplano.
La FME es la primera unidad especializada que fortalecerá la vigilancia y la capacidad de reacción frente a hechos delictivos en esta capital, Soledad de Graciano Sánchez, Mexquitic de Carmona, Villa de Arriaga, Villa de Zaragoza, Villa de Reyes y Santa María del Río, con tecnología de primera generación y sofisticados métodos de investigación.
Los primeros esfuerzos por abatir la criminalidad dieron sus frutos con la detención de 15 células criminales que se especializaban en homicidios, robo, robo de vehículos, pero también se detuvieron a mil 450 personas, algunas de ellas en flagrancia, de las cuales 334 fueron por hechos delictivos de alto impacto (homicidios dolosos y secuestro) y se liberaron a diez víctimas de secuestro.
Los resultados mencionados en el Segundo Informe de Gobierno de Juan Manuel Carreras López lograron posicionar a San Luis Potosí por debajo de la media nacional en incidencia delictiva y en delitos de alto impacto por cada 100 mil habitantes, a pesar de que históricamente, en los dos primeros años de un nuevo gobierno la criminalidad se dispara.
Pese a estos indicadores, en el inicio de esta administración gubernamental, a diferencia de otras, la entidad se mantiene en la posición número 13 nacional en delitos por cada 100 mil habitantes y en segundo y primero de la zona noreste del país con mayor seguridad para sus ciudadanos y para su sector productivo.
Para obtener estos resultados, se hizo una inversión de mil 173 millones de pesos para impulsar la unidad de Fuerza de Reacción Inmediata Mixta (FRIM), primero y la Fuerza Metropolitana Estatal (FME), que se desempeñan eficientemente para que la población tenga espacios libres de riesgo.
En el documento que concentra las actividades gubernamentales en el segundo año de su mandato, el doctor Carreras López explica que la tendencia nacional en cuanto a seguridad pública va a la alza por todo tipo de delitos y San Luis Potosí no se encuentra al margen de esa inercia, sobre todo en esta ciudad y en Soledad de Graciano Sánchez, en donde se concentran las tasas más altas de criminalidad por cada cien mil habitantes.
En estas dos localidades se cometen siete de cada 10 delitos y 8 de cada 10 de los considerados de alto impacto (homicidios dolosos), por lo que fue necesario implementar otras estrategias que ya empiezan a aportar buenos resultados, sin embargo, según el mandatario potosino, “nunca serán suficientes mientras haya un potosino afectado”.
En este segundo año de gobierno entró en operaciones la FRIM que pudo reducir la criminalidad casi un 17 por ciento y la estadística delictiva se frenó entre tres mil 500 y dos mil 500 latrocinios de todo tipo a nivel estatal, es decir, se mantiene a tope.
Por otra parte, la recientemente conformada FME dispone de 540 policías y tuvo un financiamiento de 61 millones de pesos para dar atención a los ocho municipios que conforman la zona central del estado y cuenta con las divisiones de reacción, proximidad social, turística, empresarial y zona conurbada, para manejar todos sus procedimientos con tecnología de última generación.
Tanto la FRIM, la FME y el resto de las corporaciones concentradas en la Secertaría de Seguridad Pública del Estado (SSPE) y de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) tienen un récord de 143 mil 855 litros de combustible asegurado, seis mil 250 piezas apócrifas decomisadas, 821 vehículos con reporte de robo recuperados, mil 279 cartuchos de diferente calibre incautados, 139 armas de fuego, 79 armas prohibidas, 137 kilogramos de droga, mil 242 dosis de droga diversa, 108 plantas de mariguana y 155 litros de aguardiente adulterado en su poder.
El esfuerzo del Gobierno del Estado por elevar los indicadores de seguridad llevó al gobernador Juan Manuel Carreras López a gestionar recursos federales para la construcción de un C3 y C4 que ya tienen fortalecida la red de videovigilancia en varias zonas de la entidad.
Cabe hacer la precisión de que entre las personas detenidas por las policías estatales de reacción rápida se encuentran nueve feminicidas, 187 homicidas y 44 secuestradores.
Finalmente, en cuanto a la operatividad de los centros penitenciarios del estado, no hay hacinamiento y la mayor parte de los internos trabajan en talleres domésticos en las mismas instalaciones o estudian en busca de su regreso al núcleo social.
