El doctor José Alberto Ramírez Aguilar, jefe del Departamento de Ingeniería Aeroespacial de la Unidad de Alta Tecnología de la Facultad de Ingeniería de la UNAM, estuvo presente en el Instituto de Física de la UASLP como parte de las actividades realizadas con motivo del aniversario del proyecto Cabo Tuna.El doctor Ramírez Aguilar es además representante en México del Centro de Información “Galileo” para la promoción de sistemas de navegación por satélite e integrante del Programa LatCosmos (Latinoamericanos al Espacio), que incluye el proyecto K´oto, el cual orbitará la tierra a 100 kilómetros de altura, también contribuye a la logística de la misión espacial en donde realizarán experimentos a bordo.En entrevista, habló sobre los proyectos espaciales que tiene la Unidad de Alta Tecnología de la Universidad Nacional Autónoma de México, y explicó que desde los años 90´s, la Máxima Casa de Estudios ha participado en cuestiones de desarrollo especial y en estos momentos se está trabajando en una nueva etapa.“Contamos con un laboratorio de ingeniería espacial y automotriz; se tienen proyectos espaciales, como el K´oto que se pondrá en órbita el próximo año, desde la Estación Espacial Internacional. Estamos todos con la mejor disposición y energía para aportar nuestro conocimiento para que este satélite llegue a órbita”.Dijo también que se han realizado varios proyectos al interior de la UNAM, “en los años 90´s, la UNAM desarrolló un satélite que fue una plataforma probada en la que participaron jóvenes, se puso en el espacio, y fue una gran experiencia para los jóvenes, desafortunadamente no hubo continuidad y se tradujo en no seguir probando desarrollos propios, que en este momento tuvieran a México en otro nivel, junto con Brasil, la India, entre otros países”.Explicó que en este momento, México tiene muy buena participación que ya desarrolló con la NASA, “los ojos de la comunidad mundial regresan hacia México con los acuerdos que ha firmada, tal es el caso de Artemisa; con el acuerdo firmado con Japón para el próximo año y poner en órbita a K´oto; además de otro con el gobierno del Estado de Querétaro; las instituciones como la UNAM, el gobierno, la industria, han estado apoyando este proyecto y eso es lo que necesitamos, no solamente en Querétaro, sino en todo el país”.Para concluir, el doctor José Alberto Ramírez destacó la importancia de Cabo Tuna, “es parte de la historia y de lo que ha hecho México en sistemas espaciales, en propulsión, desarrollo de subsistemas y las nuevas generaciones lo tienen que conocer. Tenemos que honrar el pasado, pero hay que seguir inspirando el futuro”.
