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MÉXICO ENFATIZA QUE LA IGUALDAD DE GÉNERO Y LOS DERECHOS HUMANOS DE MUJERES Y NIÑAS SON ESENCIALES PARA UNA EFECTIVA ACCIÓN CLIMÁTICA.

porRedacción

Nov 9, 2021

Durante los trabajos de la 26ª Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP26), que se está llevando a cabo en Glasgow, Escocia, Reino Unido, México reconoció que la igualdad de género y los derechos humanos de las mujeres y niñas son esenciales para una efectiva acción climática.

México cree fervientemente que el cuidado del medio ambiente es esencial para la vida y la dignidad humana, así como para el pleno goce y disfrute de todos los derechos humanos. Por ello, busca que todas las decisiones sean consistentes con la protección y el pleno ejercicio del derecho a la salud, a un nivel de vida adecuado, a un medio ambiente sano, a la alimentación, al agua, y a la información y educación ambiental.

Los efectos adversos del cambio climático y de la degradación ambiental afectan particularmente a las personas y a los grupos en mayor situación de vulnerabilidad, incluidas las personas en extrema pobreza, pueblos indígenas, y mujeres y niñas. Las distintas desigualdades estructurales, la discriminación y la violencia por motivos de género limitan las capacidades de las mujeres y niñas para adaptarse a los efectos del cambio climático, así como para alcanzar la paz y la seguridad sostenibles. Además, las mujeres, incluyendo mujeres y niñas indígenas, son la primera línea de defensa contra el cambio climático y son parte importante de la conservación de la biodiversidad.

Por ello, como parte de su política exterior en derechos humanos y su política exterior feminista lanzada en 2020, la delegación mexicana impulsa enfáticamente en los trabajos de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático (CMNUCC) el respeto a los derechos humanos y los derechos humanos de las mujeres y los pueblos indígenas como una prioridad para esta COP26.

La delegación mexicana, que está compuesta por 79% de mujeres y tiene a cuatro mujeres jóvenes negociadoras, ha hecho sendos llamados a la inclusión transversal de estos enfoques en todas las discusiones, ya que se espera acordar elementos transformativos, en línea con la ambición que la presidencia de la COP26 solicitó a todas las partes.

Particularmente, durante los trabajos del Documento de Conclusiones del Tema 17 de las Sesiones del Órgano Subsidiario de Implementación, México promovió que se reconocieran las múltiples crisis sin precedentes causadas por la pandemia de COVID-19 y sus impactos en la profundización de las condiciones estructurales desiguales de género preexistentes. Asimismo, en línea con el Plan de Acción de Género de Madrid, México impulsó las referencias a la justa transición de la fuerza de trabajo y la acción climática desde una perspectiva de género, con la invitación a la Organización Internacional del Trabajo para preparar un informe al respecto en marzo de 2022.

Además, el sábado pasado, durante las discusiones de las conclusiones de los órganos subsidiarios, México lamentó que durante los trabajos de revisión de los Principios Guías del Programa de Trabajo de Doha del Artículo 6 de la CMNUCC, los conceptos de “derechos humanos”, “igualdad de género” y “equidad intergeneracional” no se vieron reflejados, comprometiendo el plan de acción que se implementará en los próximos diez años.

También, la delegación mexicana hizo un reconocimiento a las mujeres defensoras del medio ambiente, recordando que México ratificó, en 2020, el Acuerdo Regional sobre el Acceso a la Información, la Participación Pública y el Acceso a la Justicia en Asuntos Ambientales en América Latina y el Caribe (Acuerdo de Escazú), que compromete a los Estados a garantizar la actuación y la integridad de las personas defensoras del medio ambiente.

En esa línea, México anunció su intención de hacer público su Plan Nacional de Acción sobre Género y Cambio Climático en la primera mitad de 2022, mismo que está en consultas con las instituciones nacionales. Este Plan, además de estar en línea con nuestra política exterior feminista, es un compromiso derivado de la COP25 en Madrid, donde México fue un principal promotor de lenguaje ambicioso.