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EL CONFINAMIENTO EN CASA OPORTUNIDAD PARA MEJORAR LOS HABITOS DELA LECTURA Y MEJORAR LOS PROCESOS DE COMPRENSIÓN INFERENCIAL DE LA MISMA.

porRedacción

Ene 17, 2021

La Maestra Blanca Camarillo integrante del departamento de procesos cognitivos avanzados del Centro Educativo “El País de las Maravillas” de la Facultad de Psicología de la UASLP, afirmó que la pandemia puede ser vista como una oportunidad para mejorar el proceso de comprensión inferencial de la lectura, aprovechando la estancia en casa.

Dijo que se debe de tener presente que que la lectura de es una habilidad que nos permite tener acceso al aprendizaje, “al conocimiento, de ahí la importancia de que se pueda favorecer durante el tiempo que permanecemos en casa debido a la contingencia que vivimos”.

Resaltó que la consolidación de las habilidades lectoras no solo se da en la escuela, “nosotros podemos poner en práctica estrategias para que nuestras familias, hijos, sobrinos, etc, puedan avanzar en estas habilidades”.

Para poder lograr esto, es muy importante que podamos distinguir entre la lectura fluida y la lectura comprensiva, “no podemos hablar de que la lectura cumpla su propósito si solamente se queda en una lectura fluida y bonita, pero que no deja un aprendizaje que enriquezca el acervo de conocimientos generales”.

“En ocasiones eso nos confunde, ya que de pronto creemos que leer bonito es leer bien, la entonación, fluidez o rapidez no significa que los niños estén comprendiendo la lectura”.

Señaló que es común en nuestro país que en la evaluaciones nacionales e internacionales se obtengan buenos resultados en comprensión literal, pero cuando hablamos de comprensión inferencial reprobamos completamente la evaluación, “por eso debemos de orientar la lectura a información que no está explícita ni clara en el texto enriqueciendo así su aprendizaje”.

La lectura comprensiva nos permite recolectar ideas centrales de un texto, “eso es lo que debemos de enriquecer, tenemos que fortalecerlo de acuerdo al nivel académico.”

Los niños pequeños de preescolar o primaria menor hasta tercer año que inician el proceso de adquisición de conocimientos de la lectura y escritura deben de tener material llamativo e interesante, “procurarles una lectura compartida haciendo partícipe al niño de lo que está leyendo, motivar su imaginación desarrollando la conciencia fonológica”.

Mientras que en los niños más grandes debemos de consolidar la conciencia fonológica con palabras nuevas, que pueden resultar más complicada, “cambiando letras, sílabas y que los niños entiendas los sonidos que resultan al realizar esos cambios”.

Finalmente debemos de analizar la lectura con preguntas inferenciales, “es decir en lugar de formular preguntas que tienen respuestas en el texto, debemos realizar preguntas que sin tener una respuesta explícita en el texto motivan, la comprensión de la lectura”.