La Facultad de Filosofía y Letras (FFyL), piedra angular de nuestra gran Universidad, es un baluarte del pensamiento crítico, un semillero de ideas revolucionarias y una cuna de virtudes que han redefinido nuestra comprensión de las múltiples realidades a nivel nacional, regional y global, así como de nuestra propia identidad, aseguró el rector de la UNAM, Leonardo Lomelí Vanegas.
Es un hogar intelectual que no conoce las fronteras en el tiempo y donde los pensamientos de quienes han pasado por sus aulas aún resuenan en cada rincón, añadió en la Ceremonia de Cancelación de la Estampilla Postal Conmemorativa de los 100 Años Facultad de Filosofía y Letras.
Durante este año de festejos, agregó, hemos celebrado los primeros 100 años de la Facultad con una serie de actividades que han reafirmado su pertinencia como espacio de reflexión y progreso. Estas acciones rinden homenaje a su historia y han renovado nuestro compromiso con los ideales y principios que la sustentan.
Ese espíritu se materializa en un acto aparentemente sencillo pero cargado de simbolismo: la emisión y cancelación de un timbre postal edición especial que representa las raíces y la esencia de esta entidad académica, expresó Lomelí Vanegas.
Cada estampilla porta consigo memoria y significado. Más allá de evocar un centenario, encapsula el espíritu de una Facultad que ha alzado la voz en defensa de la libertad de pensamiento, la igualdad, la democracia, la integridad, la equidad, la justicia y la inclusión, comentó el rector acompañado por la directora de la FFyL, Mary Frances Rodríguez Van Gort; y la directora general del Servicio Postal Mexicano (SEPOMEX), Violeta Abreu González.
Al cancelar este timbre ratificamos nuestra vocación con la misión que nos legaron quienes la fundaron: ser punta de lanza del pensamiento crítico, una trinchera de creatividad y un espacio donde la pluralidad y los consensos se construyen con diálogo, serio, respetuoso y comprometido, y que dan sentido a nuestra cultura en un marco de libertad y motivados por el desarrollo de nuestra sociedad.
Leonardo Lomelí agradeció al Servicio Postal Mexicano (SEPOMEX) “su sensibilidad y generosidad al perpetuar este momento”, pero sobre todo a la comunidad de la FFyL: a sus estudiantes, personal docente, trabajadores y egresados. “Ustedes son el alma de este lugar, y son quienes mantienen vivo su legado”.
En el acto, al que también asistieron la secretaria General de la UNAM, Patricia Dolores Dávila Aranda; y la secretaria General del Comité Ejecutivo de la Asociación Autónoma del Personal Académico de la UNAM, Bertha Guadalupe Rodríguez Sámano; Mary Frances Rodríguez externó:
Creada para formar profesionales en el estudio de la filosofía, literaturas, lenguas, culturas antiguas, historia, geografía y métodos de enseñanza, la Facultad está comprometida con su renovación, sin olvidar los valores fundamentales de su tradición.
La nuestra, continuó, se encuentra entre las facultades de humanidades más prestigiosas de América Latina y es un referente en Iberoamérica gracias a una comunidad compuesta por más de 12 mil personas; diversa en su composición social, con sus 16 distintas miradas sobre la realidad, pero con un objetivo común: construir conocimiento humanístico en beneficio de la sociedad.
Hubo una época donde la comunicación se daba de forma más pausada y a través del correo postal. “Son bien conocidos los intercambios epistolares entre intelectuales que constituyeron las bases del conocimiento humanístico”, recordó.
Resulta significativo, precisó, contar con un timbre postal que conmemora el centenario de nuestra Facultad, una de las más antiguas de la Universidad contemporánea, en la que se han formado generaciones de humanistas que han contribuido a la construcción del conocimiento, pero también han fomentado el pensamiento crítico y el análisis de nuestro presente.
Al hacer uso de la palabra, Violeta Abreu dijo que la Facultad de Filosofía y Letras ha sido cuna de grandes pensadoras y pensadores quienes han contribuido a la transformación de nuestro país.
Todas las corrientes filosóficas, teorías, hipótesis y disciplinas que aquí se enseñan, se constituyen en una llave que enriquece la cultura y al pensamiento social, agregó en el Foro Experimental “José Luis Ibáñez”.
Al igual que Correos de México, la Facultad, a través de sus años de vida, ha viajado por el territorio y el mundo al transportar ideas, pensamientos y sueños mediante cartas, y ustedes por medio de sus libros, pensadores y obras. En ese trayecto, ambos son indispensables para construir una sociedad más justa, crítica e igualitaria.
Correos de México y el humanismo están más vivos que nunca; revalorarlos es defender la libertad de las ideas y esto es fundamental en este tiempo donde lo inmediato pareciera está dejando atrás nuestra capacidad de discernir y de desarrollar un pensamiento crítico y un México mejor, advirtió.
La estampilla diseñada por Vivek Martínez plasma los elementos más representativos de esta Facultad: sus pasillos y edificios, así como su emblema, representado por Atenea, el cual nos recuerda uno de los principios fundamentales de la FFyL y del humanismo mexicano: buscar el conocimiento orientado siempre al bienestar social.
