• 15 noviembre, 2024 5:28 am

PROPUESTA INTEGRAL DE UNIVERSITARIAPARA RECUPERAR LAGUNA MEXIQUENSE

porRedacción

Ene 25, 2024

Con un proyecto original y de posible aplicación para restaurar una laguna contaminada, Ruth Ángela Adame Villamil, egresada de la maestría en Ingeniería Ambiental de la UNAM, obtuvo el Premio “Fernando González Villarreal” a la Mejor Tesis en Recursos Hídricos, estímulo que otorgan Fundación UNAM y la Red del Agua a integrantes de la comunidad universitaria. En entrevista, Adame Villamil explicó que “Estrategia para la selección del escenario conceptual más viable para el mejoramiento y aprovechamiento de la Laguna La Piedad, en Cuautitlán Izcalli, Estado de México”, fue desarrollado en el Laboratorio de Microbiología Experimental de la Facultad de Química y en el posgrado del Instituto de Ingeniería (II); y fue nutrido con muestras obtenidas en el cuerpo de agua de la localidad. Su estudio plantea un muestreo inicial para determinar cuáles son los focos en donde se requiere mayor atención, para luego concentrarlos de tal manera que se optimicen los recursos existentes y las nuevas propuestas para limpiar el vital líquido del lugar, que hoy se encuentra sin vida acuática debido a la alta contaminación. Este cuerpo de agua recibe constante vertido de contaminantes, principalmente de tipo municipal, y su flujo es más lento, lo que hace que se sature.Adame Villamil plantea una propuesta integral que considera la construcción de un humedal artificial y la puesta en marcha de dos plantas de tratamiento de agua residual que existen en el sitio, pero están en desuso. “Se sugiere empezar con una etapa en donde pondremos un humedal artificial que sirva como un filtro o riñón de la laguna. Si no se deja de verter agua contaminada no se mitigará el daño; sin embargo, sería un principio para captar contaminantes”, detalló. Los humedales tienen la capacidad de tratar el agua residual de forma química, biológica y física y, de acuerdo con la tesis, es la tecnología con mayor retención de contaminantes. Después se acoplarían al sistema de filtrado dos plantas de tratamiento: una de tipo convencional que funciona con lodos activados, captando y tratando el total del agua que entra a la laguna; y otra que ya existe en el sitio, pero necesita rehabilitación. La laguna de La Piedad tiene una particularidad: en la temporada de estiaje tiene cierta carga de agua con algún volumen de contaminación, la cual puede disminuir al aumentar la cantidad del líquido limpio durante la época de lluvias, cuando se diluyen los contaminantes, explicó. Entonces, el sistema de tratamiento debe considerar las variantes en este volumen de agua, que se presentan a lo largo del año.