Las ideas sobre la vida extraterrestre no son un fenómeno contemporáneo, se remontan a la antigüedad clásica grecolatina donde filósofos y pensadores como Heráclito especularon sobre esto, explicó el profesor emérito de la Facultad de Ciencias de la UNAM, Antonio Lazcano Araujo.
El también miembro de El Colegio Nacional mencionó que el primer auge de estas ideas ocurrió en la década de los 20 del siglo pasado. Antes, durante el siglo XIX, permeaban en un contexto entre la planetología y la Teoría de la Evolución, por lo que ahora aunado al desarrollo tecnológico extraordinario, “es natural que pensemos que la vida es frecuente en partes de otra galaxia”.
Al intervenir en la mesa redonda, “Vida en el universo: Miradas desde la ciencia y las artes”, convocada por el Instituto de Investigaciones Bibliográficas (IIB) de la Universidad Nacional, el expresidente de la International Society for the Study of the Origins of Life, aclaró:
La aparición de la vida no es un evento repentino; “no sabemos qué tanto material de las nubes interestelares se integró a aquella Tierra primitiva, por lo que la etapa de la búsqueda de vida extraterrestre ha servido también para explicar el origen de la misma en la Tierra”.
En el auditorio “José María Vigil” del IIB, el también doctor honoris causa por las universidades de Milán y Valencia, dijo que el momento dorado de las ideas de vida extraterrestre ocurrió en la mitad del siglo XX: “es en la Guerra Fría donde se multiplica el fenómeno, en una atmósfera persecutoria”.
“Es justo esa relación entre historia, política y prejuicios que vuelve fascinante este tema; no tenemos pruebas de que haya vida más allá de nuestro planeta, pero tenemos esperanzas”, añadió.
“FANIS”
El conversatorio convocado debido al interés que motivó la exposición “125 años de noticias sobre objetos voladores no identificados en la prensa mexicana” -que continúa abierta y se extenderá hasta el 5 enero de 2023, en la Sala de Consulta de la Hemeroteca Nacional de México del IIB-, fue presentado por Pablo Mora Pérez-Tejada, director de esa entidad académica, quien mencionó que se trata principalmente de difundir el patrimonio hemerográfico sobre el tema.
En su oportunidad, el investigador del Instituto de Astronomía de la UNAM, José Franco López, apuntó que esas manifestaciones visualizadas en el cielo “ya no se llaman OVNIS”.
“Para empezar ya no se denominan así, porque no hay evidencias de que sean ‘objetos’; ahora se conocen como FANI, ‘Fenómenos Atmosféricos No Identificados’, pero de cualquier manera su interés se fundamenta en dos preguntas permanentes: ¿cuál es el origen del mundo y de la vida?, y ¿estamos solos en el Universo?”.
El exdirector general de Divulgación de la Ciencia de la UNAM informó que cinco mil 284 planetas han sido identificados fuera de nuestro sistema solar, y una cifra similar está en proceso de autenticación.
Es un hecho, continuó, que se han encontrado en el espacio elementos presentes en algunas moléculas asociadas a la vida, como la Fosfina (Fosfano), un compuesto químico generado en el intestino de los animales.
“No hay que perder de vista que todos los elementos químicos que componen a los seres humanos -a excepción del hidrógeno y el helio- han sido ‘cocinados’ al interior de una estrella, por lo que podemos poner a estos cuerpos astronómicos en nuestro árbol genealógico”, refirió.
Tampoco hay que olvidar que la Exobiología estudia la posibilidad de vida fuera de la Tierra, ya sea como búsqueda directa o indirecta, a través de la detección de vida microbiana, o de rastros que permitan inferir la presencia de vida. “Una cosa es que pueda haber vida en otro planeta, y otra que haya comunicación entre entidades”.
En la actividad académica estuvieron: Marcela Chao Ruiz, directora y fundadora del Proyecto Marsarchive.org, sitio que recopila información sobre el planeta Marte; así como el escritor y científico Carlos Chimal.