Los desafíos que enfrentan las instituciones académicas se despliegan en distintas aristas. El retorno a la realidad híbrida o mixta, entre lo presencial y lo virtual, supone retos de diversas naturalezas y en nuestras agendas de trabajo; uno de ellos, que no es menor, es el funcionamiento del servicio y el acceso a las bibliotecas y a sus materiales, consideró el director del Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ) de la UNAM, Pedro Salazar Ugarte.
En el Tercer Encuentro y Primer Congreso Internacional de Bibliotecas Jurídicas. Esquemas de trabajo híbrido y nuevos escenarios laborales, añadió:
Se busca una perspectiva internacional para abordar estos retos, porque son comunes a nosotros y a instituciones aliadas como la Universidad de Arizona, que cuenta con una exitosa experiencia en esta materia.
En el encuentro a distancia organizado por el IIJ y el Colegio de Leyes James E. Rogers, de la Universidad de Arizona, Estados Unidos, la directora del Instituto de Investigaciones Bibliotecológicas y de la Información (IIBI) de la UNAM, Georgina Araceli Torres Vargas, consideró:
En las bibliotecas jurídicas, debido a los cierres por la pandemia, hay más interrogantes que soluciones y es momento de incertidumbre porque en estos recintos se lleva a cabo la reorganización del trabajo, y la adecuación de servicios para el ofrecimiento de la información. Por ello, celebró que este tema se considere central.
Para la secretaria académica del IIJ, María Marván Laborde, el Congreso -en el cual participan instituciones de México, la Unión Americana, España, Argentina, Costa Rica, Chile y Colombia-, es muestra de lo que ha dejado la emergencia sanitaria.
“Nos ha exigido dos cosas: la capacidad de adaptación del ser humano y la resiliencia. Hemos podido seguir trabajando en gran medida gracias a esta adaptación de las bibliotecas, que no fue menor. Ya hemos experimentado estos esquemas de trabajo híbrido y a distancia, en donde hemos podido acercarnos con la Universidad de Arizona, con la Estación Noroeste de Investigación y Docencia del IIJ y con muchas otras instituciones”, refirió.
En su oportunidad, el investigador del IIJ y jefe de la Biblioteca Jorge Carpizo de esa entidad académica, Federico Hernández Pacheco, señaló que estos recintos son parte del desarrollo de las civilizaciones.
“Aún permanecen en las sociedades como instituciones que apoyan a diferentes esquemas de información de instituciones educativas, empresariales, y de toda la sociedad en general”.
Marc Miller, decano del Colegio de Leyes James E. Rogers de la Universidad de Arizona, dijo que esta institución tiene el compromiso de establecer lazos con otras del ámbito jurídico de alto prestigio. Destacó que la Biblioteca Daniel F. Cracchiolo, de esa casa de estudios norteamericana, ejerce un rol de liderazgo en el acceso a la información jurídica y a la justicia.
“Este Congreso dará oportunidad para compartir ideas, experiencias y lecciones aprendidas mientras continuamos teniendo el embate de la pandemia”, comentó.