Los Servicios de Salud del Estado informaron que durante el año 2020 se brindaron 684 consultas de atención psicológica a personas que han sido víctimas de violencia sexual, y en 2021 hasta el mes de abril ya suman 165, por lo que hicieron un recordatorio a la población sobre la disposición del Módulo Especializado de Atención a la Violencia contra la Mujer, para otorgar atención oportuna.
De acuerdo con la información de SS, la violencia sexual se produce en todos los sectores de la sociedad y afecta a personas de ambos sexos y de todas las edades, familias y comunidades, lo cual ocasiona un grave problema de salud pública.
Datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre Salud de la Mujer y Violencia Doméstica, revelaron que entre el 15 y 71 por ciento de ellas han sufrido violencia física o violencia sexual infligida por una pareja en algún momento de sus vidas. Además, revela que este tipo de violencia genera una amplia gama de problemas físicos, mentales y de salud sexual a corto y largo plazo; sin embargo, prevenirla es posible, cambiando las condiciones que contribuyen a la violencia sexual.
Por lo tanto, la dependencia de salud pública estatal emitió algunas medidas que ayudarán a prevenir la violencia sexual en la adolescencia, en el ámbito comunitario, como son enseñar a las hijas e hijos a respetar y a tratar a otras personas como les gustaría que los trataran; conversar con sus hijas e hijos para hacerles saber que siempre pueden acudir a usted si alguien las o los toca inapropiadamente; tratar de visibilizar y rechazar, todo aquel acto que implique acoso callejero u hostigamiento sexual en los espacios públicos y privados, en la medida de sus posibilidades, siempre y cuando no se ponga en riesgo o exista algún apoyo policial cercano.
Si lo visualizamos y rechazamos, habrá un cambio en la comunidad y dejaremos de normalizar este tipo de comportamientos de acoso callejero y hostigamiento sexual.
Otras medidas son enseñar acerca del consentimiento, ya que es de suma importancia asegurar que las y los adolescentes, comprendan que cualquier contacto o actividad sexual debe ser de mutuo acuerdo, libre, voluntaria y claramente por ambas partes, sin violencia; y sobre todo, tratar de hacer hincapié en esto antes de que inicien sus primeras citas en el ámbito de las relaciones afectivas.
Los Servicios de Salud en el Estado, a través del programa de Salud Reproductiva, pidieron a la población que si viven algún tipo de violencia acudan a la unidad de salud más cercana, para recibir atención especializada y lograr hacer frente a esta situación de violencia.