El lamentable accidente se suscitó a la altura del kilómetro 53 del Libramiento Oriente, cuando el conductor de un automóvil Seat Ibiza se desplazaba a velocidad inmoderada, según magnitud de impacto, lo que habría provocado que impactara contra la parte posterior de un tráiler marca Kenworth.
Debido al fuerte impacto la unidad empezó a arder en llamas, el conductor del automóvil no alcanzó a salir de la unidad y falleció calcinado en el interior.