Un duro golpe a las finanzas municipales de San Luis significa la reducción de 6 por ciento de las participaciones federales para el año 2021, y si a ello se agrega la inflación de ese año, que se prevé será de 3.6 por ciento, bajarían casi un 10 por ciento los recursos para el Ayuntamiento.
Así lo expuso el Tesorero Municipal, Rodrigo Portilla Díaz, quien comentó que usualmente las participaciones federales se aumentan año con año para contrarrestar los efectos de la inflación, pero esta vez no sólo no aumentaron, sino que se redujeron, “y recibir 10 por ciento menos ata las manos municipales para emprender obras que la ciudad y el Municipio en general necesitan”.Dijo que aún queda una leve esperanza de mitigar el impacto económico financiero, que, en su revisión del paquete económico, el Congreso de la Unión haga modificaciones que aminoren el golpe de los recortes.
“Eso puede suceder, pero depende de que personal de diversas instancias del estado se apersonen en el Congreso de la Unión, para negociar y convencer a los legisladores federales de la necesidad de hacer cambios para no castigar tan drásticamente a los municipios”, expresó.
Pero dijo que si no hay cambios y el paquete presupuestal que envió la Secretaría de Hacienda lo convalida el Congreso y se queda como está, el Municipio no tendrá recursos más que para administrar lo que hay, atender los servicios municipales básicos y pagar la nómina de sus trabajadores y empleadas.
Aseguró el Tesorero que se pondrá especial cuidado en la recaudación local que básicamente proviene del impuesto predial y de traslado de dominio, pero si se toma en cuenta la débil situación económica que priva en el país por la pandemia, es poco lo que se espera.
Además del golpe de 6 por ciento menos en todos los fondos participables, 8 por ciento en lo que concierne a ramos y la desaparición del Programa de Fortalecimiento para la Seguridad (FORTASEG), remató que hacen más difícil la situación
